Ayudarnos unos a otros
La Ética Sabia se fundamenta en 5 pilares:
- El cuerpo es mente y la mente es cuerpo.
- El desafió es elevar la conciencia.
- Resolver la Gran Paradoja.
- Nos conectamos con los principios y valores universales.
- Ser ciudadanos del mundo.
1. El cuerpo es mente y la mente es cuerpo.
La idea de que la mente y el cuerpo son entidades separadas se conoce como dualismo cartesiano, que se remonta al filósofo René Descartes. Sin embargo, esta visión ha sido desafiada por numerosos descubrimientos que muestran que la mente y el cuerpo están estrechamente interconectados, así que esta separación es cada vez más cuestionada por la ciencia, la medicina y por SABIA NUTRITION.
La fuerte interconexión que hay entre el cuerpo y el cerebro conforman la mente. Hacen parte de un mismo sistema en constante retroalimentación. Las emociones, pensamientos y experiencias tienen un impacto directo en el cuerpo y el cerebro.
Por ejemplo, el intestino y el cerebro están conectados a través del sistema nervioso entérico, que puede influir en nuestro estado de ánimo, nuestra memoria y nuestra capacidad para tomar decisiones; cuando experimentamos estrés, nuestro cuerpo libera hormonas como el cortisol y la adrenalina, que pueden afectar nuestra mente y nuestro cuerpo de manera simultánea y puede manifestarse físicamente en forma de dolor de cabeza, fatiga o problemas gastrointestinales; y el dolor físico puede tener consecuencias emocionales como ansiedad o depresión.
Se ha demostrado que la mente puede influir en el sistema inmunológico, y que el estrés crónico puede debilitar nuestro sistema inmunológico. Asimismo, una dieta equilibrada y saludable puede tener un impacto positivo en el estado mental y emocional. Asimismo, en este sentido, las palabras pueden ser un alimento para el cuerpo y la mente, ya que a través de ellas podemos expresarnos, comunicarnos y transmitir nuestro conocimiento y emociones. Las palabras bien empleadas pueden motivar, inspirar y generar cambios positivos en nosotros mismos y en los demás. Es importante prestar atención a lo que decimos y cómo lo decimos, ya que las palabras tienen un gran poder y pueden afectar tanto a nuestro bienestar emocional como a nuestra salud mental. Por eso, es fundamental usarlas de manera consciente y responsable, y elegir aquellas que nos nutran y nos hagan crecer. Y siempre podemos transformarnos pues la neuro plasticidad de nuestro cerebro es capaz de reorganizarse y adaptarse en respuesta a nuevas experiencias y aprendizajes. De ahí la importancia de cuidar tanto el cuerpo como la mente para lograr un estado óptimo de bienestar.
2. El desafío de elevar la conciencia.
El desafío de elevar la conciencia planetaria se refiere a la capacidad de cada persona para comprender y apreciar la interconexión con los seres vivos y los ecosistemas del planeta.
Elevar la conciencia planetaria implica:
Reconocer la interconexión: Comprender que todos los seres vivos y los ecosistemas están interconectados y que nuestras acciones tienen un impacto en el planeta.
Desarrollar una perspectiva global: Considerar los problemas y desafíos globales, como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la desigualdad social.
Fomentar la empatía y la compasión: Desarrollar una mayor empatía y compasión hacia todos los seres vivos y los ecosistemas.
Promover la educación y la conciencia: Fomentar la educación y la conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad, la conservación del medio ambiente y la justicia social.
Inspirar la acción colectiva: Inspirar a las personas y las comunidades a tomar acción colectiva para abordar los desafíos globales y proteger el planeta.
Cuidarnos de la desinformación: Aprender sobre las tácticas y los métodos utilizados para difundir desinformación. En ocasiones la desinformación puede ser difícil de detectar, pero al ser conscientes de que esto es una realidad, podemos reducir el riesgo de ser engañados.
Fortalecer el pensamiento crítico: Es fundamental cuestionar todo, buscar evidencia y analizar argumentos de manera objetiva; considerar múltiples perspectivas y evitar sesgos y prejuicios. Esto implica mantener una mente abierta, estar dispuesto a cambiar de opinión ante nueva información y aprender de los errores, todo ello con el fin de tomar decisiones informadas y desarrollar una comprensión más profunda de la realidad.
En la actualidad contamos con la inteligencia artificial IA para hacer preguntas e investigar temas, es una herramienta que nos brinda conocimiento debido a su gran capacidad para recoger datos e información resumida y, con un alto nivel de objetividad.
3. Resolver la Gran Paradoja.
La contradicción del sistema económico y la idea de humanidad
El sistema económico está basado en el consumo de productos y servicios. Lo cual, ha deteriorado los ecosistemas de la naturaleza y ha provocado desequilibrios en la atmosfera. Pero si las economías dejan de crecer porque se disminuye el consumo, el sistema que permite la civilización colapsa; si continuamos agotando los recursos naturales y vertiendo basuras de todo tipo al planeta Vida, el proyecto de la civilización humana fracasara.
La mente del sistema promueve la consecución de riqueza. Nos hemos acostumbrado a observar comportamientos como el afán de poder, la búsqueda de ascenso social, la competencia, el hedonismo, la obsesión por el éxito económico y su derivado el consumo de productos.
Las personas quieren gastar dinero de muchas formas y siempre tienen en mente una lista de deseos que ha sido programado por el consumo de los vecinos y el marketing.
El sistema presiona a las personas para ajustarse a unos patrones que se consideran convenientes y exitosos, lo que ha conducido a diversas formas de malestar psicológico; la comparación con el otro, la búsqueda de reconocimiento, la frustración de no poder realizarse si no se logra o “no ser alguien”.
La contradicción del sistema ha creado una civilización neurótica. Las necesidades básicas de supervivencia ya no son suficientes, todos quieren más. De ahí la incertidumbre, el miedo, la ansiedad y la desesperación.
En resumen, la Gran Paradoja del sistema económico es la contradicción entre la ansiedad y el estrés mental que afecta a la mayoría y la ambigüedad de la acumulación de riqueza y, al mismo tiempo la creciente desigualdad social y destrucción ambiental.
Ampliar la conciencia tiene implicaciones en el bienestar físico y mental que a su vez se irradia en la consciencia colectiva. Comprender en que mundo vivimos, en especial la Gran Paradoja en la que se encuentra la civilización, debido a un sistema social que depende del consumo para obtener los ingresos del que también dependen las personas, las familias, las instituciones, los gobiernos y los países. La contradicción de la forma como ese consumo está destruyendo los recursos naturales y ha llevado al planeta a una crisis existencial.
¿Podremos vivir en equilibrio con estas dos fuerzas que se contraponen?
La IA Meta dice que para resolver la Gran Paradoja del sistema económico se requiere un enfoque integral que combine la economía circular, la economía social, la economía verde, los impuestos y políticas fiscales, la educación y conciencia, y la colaboración y cooperación.
Y de pronto, con esta compresión surge un ser humano que reconoce la urgencia de transformar nuestra mente y elevar nuestro nivel de conciencia para actuar con sabiduría.
4. Principios y valores Universales.
La ética global
Por encima de cualquier ideología o costumbre social, hacer el bien es el propósito del ser humano. La ética plasmada en la Carta de las Naciones Unidas y la Declaración Universal de los Derechos Humanos orienta el análisis y las acciones de las personas, las comunidades y los países.
Los países en consenso definieron los valores, principios y los criterios del Bien Supremo. Lograron unificar contextos de las diferencias culturales; tanto los ideales de las religiones más poderosas y las no tan conocidas y, los criterios de los sistemas de gobierno sean de izquierda o de derecha; así como las constituciones, leyes y normas de los países.
Asimismo, se establecieron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que fueron aprobados por unanimidad por los 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas el 25 de septiembre de 2015, durante la Cumbre de Desarrollo Sostenible en Nueva York. Son 17 objetivos interconectados con 169 metas específicas y 232 indicadores para medir progreso y, con fecha de cumplimiento en el 2030.
Para SABIA estos objetivos le dan orientación en todo aquello que la sociedad requiere para ser más justa, sostenible y desarrollar una civilización del bienestar.
5. Ser ciudadanos del mundo.
Estados Unidos es la organización de personas más eficiente del mundo y hacemos parte de la unión de las naciones. Somos estadounidenses conscientes de nuestra capacidad para ayudar al mundo. Tenemos una economía fuerte, una gran capacidad de innovación y una larga tradición de liderazgo global que nos da el potencial para ir adelante en la transformación positiva en el mundo y representar el liderazgo ético.
Así que, más allá de tener un pasaporte con múltiples sellos, ver canales de streaming y participar en redes sociales. Ser ciudadano del mundo es una forma de vida que implica ampliar la visión para descubrir el sentido de unidad planetaria. El ciudadano del mundo respeta la diversidad, trasciende las diferencias y es sensible ante las realidades de otras personas, comunidades y la naturaleza.
Un ciudadano del mundo actúa con responsabilidad, justicia, integridad, transparencia, honestidad y animo colaborativo; es consciente y, le gustaría que se reafirmara la alianza de las naciones para que desaparecieran las guerras, que las diferencias se pudieran resolver en las cortes internacionales o en las salas de la asamblea de las Naciones Unidas; que la gobernanza planetaria pudiese intervenir gobiernos que transgreden los derechos humanos, que nadie viviera de forma indigna, que ningún ser humano aguantara hambre y se acabara la pobreza, que se revirtiera el daño que se le ha hecho al planeta Vida debido a la sobreexplotación de recursos, que los dineros desperdiciados en armas se trasladaran a la educación para elevar la conciencia de las personas, que se desarrollaran tecnologías descontaminantes y, se lograra encontrar curas y mejores tratamientos para las enfermedades, que los recursos se usaran para realizar programas sociales a los más desfavorecidos, incluso, financiar un ingreso básico universal.
Cuando estamos bien con nuestras vidas podemos ser hacedores y ser parte de los principios universales establecidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como realizar acciones prácticas para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y poder ser partícipes del PACTO PARA EL FUTURO.
Para ser parte de la solución hay muchas acciones que podemos realizar sea; con nuestros hábitos saludables y sustentables, con la educación y el ejemplo que damos a la familia y a las personas cercanas, también podemos participar en movimientos sociales o realizar activismo pacífico, apoyar una ONG, realizar voluntariado, promover la democracia ética y la participación ciudadana sin discursos de odio y sin violencia, afrontar los desafíos y obstáculos de la desinformación; ayudar a crear consciencia al fomentar la empatía, la compasión y la solidaridad con los menos afortunados.
Tampoco se puede ser ciudadano del mundo, sin antes ser un buen integrante de familia, un buen ciudadano en su comunidad y país. Ser ciudadano del mundo es un mérito y una responsabilidad. Pensar globalmente y actuar localmente requiere información y estudio. Un ciudadano del mundo es un miembro activo en el lugar donde nació, o bien, porque vive hace un tiempo en un territorio. Comprende que sus actos tienen correspondencia y repercusiones en el resto del planeta y la civilización, así que actúa con prudencia y se compromete a ayudar a construir un mundo más justo, equitativo y sostenible, basado en los fundamentos de la ética global establecido por las Naciones Unidas.
Dejar de ser un simple espectador que juzga sin el suficiente conocimiento es elevar la conciencia.
¡La vida es Sabia!
